Sorpresa y euforia por el batacazo legislativo: «Hoy comienza la construcción de la Argentina»

Noticias Política
Milei intenta ordenar la interna y en LLA destacan la coordinación conjunta. Dirigentes presentes y las especulaciones sobre los cambios que se vienen. Cómo leyó el Gobierno la victoria del 26-0. Sigue en pie la alianza con gobernadores

Aunque al principio se mostraron preocupados por los altos niveles de ausentismo en la jornada electoral de este domingo y la pelea por la fiscalización en la provincia de Buenos Aires, el Gobierno estalló de euforia esta noche en el búnker situado en el Hotel Libertador, donde se impuso el sello violeta en 16 provincias y ganaron un total de 64 diputados y 13 senadores.

«Hoy claramente ha sido un día histórico para la Argentina. El pueblo argentino decidió dejar atrás cien años de decadencia y persistir en el camino de la libertad, el progreso y el crecimiento. Hoy pasamos el punto bisagra; hoy comienza la construcción de la Argentina grande«, celebró el Presidente.

En ese sentido, destacó esta noche que «el país entero confirmó su vocación de cambiar de forma irreversible el destino de la patria» y llamó a «afianzar el camino reformista«. El amplio apoyo electoral, que sorprendió a todos, no disminuyó el tono de búsqueda de consensos y Milei también felicitó a los oficialismos provinciales que se impusieron sobre el peronismo y llamó a los gobernadores a hacer alianzas en el Congreso.

LLA pasará de 37 diputados propios a 101 diputados y de 7 a 20 senadores, y el Presidente ponderó que «hay decenas de diputados de otros partidos con los que podemos encontrar acuerdos básicos». Dado que «en muchas provincias la segunda fuerza no fue kirchnerismo sino oficialismo provincial», Milei invitó a «la gran mayoría de los gobernadores discutir en conjunto estos acuerdos».

Reacción a los resultados

En los pasillos se sintió una «victoria de Karina Milei» en relación a la estrategia de lanzar el sello en la gran mayoría de las provincias, algo que al principio criticó el ala del asesor Santiago Caputo y terminó dando resultado: «Menem tenía razón«, dijo por lo bajo un operador del karinismo. Otros vieron como punto de inflexión el Movistar Arena, orquestado por el asesor presidencial, en donde el Presidente «volvió a las bases» y revivió la mística libertaria. «Fue un punto de inflexión«, interpretaron cerca de Caputo.

En ese sentido en el partido destacaron que en realidad la organización de la campaña en conjunto fue la clave. «Fuimos todo para el mismo lado y se trabajó muy bien», destacan. «Una victoria así no es para robársela de los lados«, dijo un allegado al asesor presidencial.

Los violetas también le dan mérito a la candidatura de Diego Santilli en la provincia de Buenos Aires. El escándalo de «Fred» Machado que terminó bajando José Luis Espert fue, al final, lo que necesitaban para ir en alza y darse el gusto de dar el batacazo en la provincia.

La sorpresa palpó hasta los más optimistas, que daban la provincia por perdida y soñaban con acercar el margen a un dígito como el mejor escenario posible. Terminaron ganando por 41,50 puntos.

Por el búnker desfiló el saliente ministro de Justicia, Mariano Cuneo Libarona, y el titular de la SIDE, Sergio Neiffert, entre otros funcionarios clave e influencers militantes. En el Hotel Libertador se inundó de cánticos de «Kuka Tira Piedra» y otras reversiones libertarias de canciones de rock que cantó el jefe de Estado junto a su «banda presidencial» en aquel show del Movistar Arena.

Mientras en el búnker festejaban, Milei, que llegó cerca de las 19, se reunió por horas con Santiago Caputo y Karina Milei en el subsuelo.

Los personajes libertarios comenzaron a desfilar por avenida Córdoba cerca de las 18. Los primeros en arribar al centro neurálgico libertario fueron todos del ala karinista, empezando por la mismísima Karina Milei, de buen talante. Los primos Menem llegaron poco después, tanto «Lule» como Martín y Sharif, el responsable del ala juvenil. También el presidente de LLA bonaerense, Sebastián Pareja, se sumó a una primera reunión de la mesa política de «El Jefe». 

Minutos después, Karina Milei junto a Martín Menem salieron a la puerta del Hotel Libertador para brindar unas primeras palabras. «Estamos muy contentos, estamos esperando los resultados», aseguró la hermana del Presidente, que destacó que la jornada se desarrolló con normalidad. Además, envió un mensaje a los fiscales y les pidió que se queden «hasta el final» de la jornada para poder garantizar la transparencia en el conteo en las sedes de votación.

Esta noche se define todo: si bien el jefe de Estado ya tiene en mente la nueva estructura de su Gabinete, la designación (o ratificación) de los interlocutores tendrá un peso notorio en esa búsqueda de consensos.

Todas las carteras están en revisión, pero el ojo está puesto especialmente en Guillermo Francos, el jefe de Gabinete que, en su hartazgo por la disputa territorial con el asesor Santiago Caputo, llamó públicamente a darle una firma oficial dentro del equipo para que asuma la responsabilidad. La versión que primó al principio horas en el pasillo del Libertador es que lo podría reemplazar Manuel Adorni, tal como anticipó El Cronista meses atrás. 

Tras el triunfo, esa versión bajó la espuma y la idea de permanencia de Francos se reinstaló.

Caputo no está interesado en ocupar un cargo, pero difícilmente se negará a hacerlo si el Presidente se lo pide. Milei anticipó que haría y desde entonces atraviesa una sensación de inquietud dentro del Gabinete: no por nada se bajaron dos ministros antes de que el Presidente autorizara dar a conocer esas salidas.

No solamente se baraja como posible jefe de Gabinete, sino también como ministro del Interior, una cartera que revivió Milei como primer gesto de gobernabilidad tras la derrota en los comicios bonaerenses de septiembre y hoy ocupa Lisandro Catalán, un hombre de Guillermo Francos.

Hoy Milei se reunirá con ambos en un encuentro trasnochado en el búnker, junto con su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, para determinar cómo será el nuevo diseño de poder en este segundo tramo de gestión.

Por caso, Karina es la gran protagonista de la jornada, puesto que el sello a nivel nacional que permitirá un festejo nominal es obra de ella y los candidatos electos serán los de Eduardo «Lule» y Martín Menem, su mano derecha en el armado.

El ala del caputismo disputará una eventual victoria por su trabajo en la campaña, aunque una derrota quedará en manos de la estrategia política que tomó Karina Milei por elegir a candidatos sin peso o con pasado kirchnerista bajo la idea de que el sello de Milei era lo más importante.

Por

Desde la cúpula hace meses esperan que Milei baje el martillo por este ruido interno, aunque algunos allegados menos optimistas creen que en realidad se terminará por reforzar la disputa. Durante todo el año electoral se exacerbaron las internas entre ambos vértices del «Triángulo de Hierro», con el armado de listas como problemática principal, y el foco está puesto en si Milei buscará un equilibrio.

Desde el Gobierno aclaran que no es tanto la silla sino los roles delimitados. El karinismo se resiste en una posible avanzada de Santiago Caputo y menos en el terreno de los Menem: la Cámara de Diputados. «Los cambios no van a ser tantos como se espera«, se anticipan algunos.

Otros, además, cuestionan si será cierto que Milei tomaría la decisión de empoderar más al asesor presidencial, puesto que un rol formal en el Gabinete creen que podría más bien limitarlo.

Por Daniela Romero