Está demostrado que el Mercosur solo ha llevado a mayor pobreza al Paraguay, que sigue sin beneficiarse a casi 20 años del supuesto proceso de integración, aseveró el empresario Orestes Pereira Filho.

El vicepresidente de la Cámara de Reconstructores de Neumáticos del Paraguay, Orestes Pereira Filho, comentó que ha leído en nuestras páginas los reclamos de las industrias láctea, gráfica, plástica, de aerosoles, confecciones, neumáticos y tantos otros sectores de la economía paraguaya que no pueden desarrollarse a causa de barreras extraarancelarias y otras que nuestros principales socios en el Mercosur nos imponen.
“Tengo mayor propiedad para hablar del tema neumáticos, que es mi sector, que prácticamente viene sobreviviendo en el mercado interno, impedido también a utilizar el Tratado de Asunción, que ha creado el ficticio mercado expandido, que solo garantiza el mantenimiento de la pobreza en nuestro país“, aseveró Pereira.

Agregó que el Mercosur ha servido al presidente del Brasil, Lula Da Silva, como un elemento de “estatus” a escala internacional. “Me pregunto: ¿hasta cuándo los gobernantes paraguayos van a permitir la desigualdad de trato entre nuestros productos y los de ellos? ¿Hasta cuándo van a permitir que tengamos que pelear no solamente en los mercados externos y también en nuestro propio territorio de forma tan desigual?”, exclamó.


Añadió que en el caso de los neumáticos Brasil impuso al Paraguay un cupo de 120.000 unidades anuales, mientras la capacidad instalada local es de 150.000 mensuales. Sin embargo, no existe ningún cupo para la entrada de neumáticos nuevos brasileños al mercado paraguayo.
“Aumentarán nuestro cupo a 168.000 al año, pero nos dieron un plazo para cumplir con el mínimo inferior al que tenemos que esperar para recibir nuestra materia prima. Acusan a nuestro neumático de crear un pasivo ambiental, sin embargo, nuestros clientes pagan 70 dólares por tonelada para que sea destruido en aquel país la misma cantidad de neumáticos inservibles que están importando antes de que nuestro producto ingrese en el territorio brasileño”, dijo.


Añadió que los neumáticos brasileños no pagan lo mismo para ingresar a Paraguay, pero sí crean aquí un pasivo ambiental que genera serios problemas a la salud pública, dado que los neumáticos que fueron utilizados aquí no pueden ser remanufacturados, pero no son destruidos. Indicó que asimismo impuso el impuesto IPI de 15% que debe ser pagado para que liberen los neumáticos paraguayos exportados en la frontera. “Al mismo tiempo, Brasil no cobra a sus productores ese impuesto cuando exportan a nuestro país, y para este año Brasil concedió un cupo de 80.000 neumáticos que debe ser cumplido hasta el mes de abril“, dijo.


Sostuvo que “esta concesión fue dada a mediados de enero, por lo que es imposible comprar cascos de neumáticos usados en Europa y recibir en Paraguay en tan poco tiempo, y cómo adquirir el caucho necesario para producir los neumáticos sin tener la seguridad de que vamos a tener las carcazas a tiempo. La adquisición de caucho envuelve una gran inversión, y si el tiempo no es suficiente, qué hacer con esa materia prima que tiene plazo de validez de 90 días. Entre tanto, Brasil ha decidido también que nuestros clientes allá soliciten una licencia previa a la importación y las primeras de este año solo fueran concedidas en febrero”.

Fuente: abc digital